LA EXCURSIÓN DE JUAN
Un día vimos a un chico reírse a carcajadas mientras su madre tendía la ropa y su padre llenaba el porrón.
El padre seguía riéndose como si le hubiesen contando un chiste buenísimo, cuando su madre terminó de tender y dio de comer a su perro Manchitas.
El padre le dijo a Juan, el niño que se reía, que se iban de excursión al rio. Cerca de allí descubrieron un torreón. Entraron en él y se encontraron una sierra, que era misteriosa.
De repente, salío un rey muy enfadado porque sus guardias se habían tropezado y habían roto un valioso jarrón.
Manchitas fue a atacar al rey, y éste cogió unos remos para defenderse y una red para atrapar al perrito. Manchitas entró en una sala y salió de ella con una sábana encima como si fuera un fantasma.
Para huir el rey, Juan y su familia se montaron en una barca que estaba en el río y Manchitas se pinchó con las espinas de un rosal.
El Rey les quiso atacar con su jarrón roto, pero como no podía Juan se iba riendo de él.
¡Aquella excursión jamás la olvidarán!
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